OPINIÓN: Gilberto ‘el sobrado’ Herrera

Durante la visita de Claudia Sheinbaum en El Marqués el pasado sábado 4 de noviembre, el senador, Gilberto Herrera Ruíz se llevó desagradable sorpresa.

El exrector de la UAQ llegó al sitio antes de las 11:00 Hrs. Se encontraba en el acceso a la explanada en un pasillo en zona de espera y saludaba gente conforme llegaban al sitio. Se notaba nervioso a la espera de la precandidata a la Presidencia, quien llegó pasadas las 12:30 hrs (con más de una hora de retraso).

Ya comenzaban los abucheos de los asistentes, pero el influencer controlado por Herrera Ruiz, Fernando Avse, quien fungió como moderador del evento, calmó los ánimos.

Al llegar Sheinbaum, Gilberto Herrera se acercó al acceso para recibirla e ingresar cerca de ella, por segunda vez, al lugar.

Al iniciar el evento cerca de las 13:00 horas, se le observó de pie entre la gente. En varias ocasiones le ofrecieron un asiento, pero lo rechazaba diciendo que “prefería estar con la gente” .

Cuando dio inicio el discurso de Claudia, Herrera aplicó el gallo-gallina-pollito en reversa y se fue retirando hacia la orilla de la explanada cerca de las gradas donde platicó con una persona un par de minutos.

No habían pasado ni 10 minutos de discurso cuando Gilberto Herrera se retiró del sitio acompañado de otra persona y no regresó a pesar de no haber terminado el evento.

¿Se aburriría? ¿No tuvo la recepción esperada? El caso es que Herrera Ruiz abandonó el evento en pleno acto de la Coordinadora Nacional de la 4T.

Cabe mencionar que también se observó la presencia de Luis Adrián Moreno Mendoza, el agitador de la peor calaña que cobra en el Senado de la República al amparo de Gilberto; sin embargo, en el evento se comportó, no como lo hace cada vez que visita Centro Cívico para alborotar el gallinero.

Por si fuera poco, ese mismo sábado por la tarde hubo otro evento de estructuras en el Salón Villagran en Corregidora al cual por cierto Gilberto Herrera llegó tarde y lo dejaron fuera junto con Andrea Tovar.

No cabe duda que aunque trate de disimular cercanía, está más lejano que nunca.

¿Qué señales da esto? Tal vez sea que Herrera Ruiz pierde la posibilidad de la reelección y se le acaban las posibilidades de quemar aunque sea sus cartas en Corregidora.